Outlander 5x03. A fungirlish review [Spoilers]

¡Bienvenidas por este fungirleo otra semana más! Nos pilláis con el culo carpeta de estar sentadas en el sofá outlandereando pero haremos el esfuercito de levantarnos y caminar de la mano de los Fraser durante casi una hora, que no hay nada mejor para nuestras posaderas que moverlas al ritmo que Jamie Fraser nos marque (dicho esto en todos los sentidos posibles, claro está 😆). ¿Venís con la cantimplora y el saco de dormir para la excursión de hoy? ¡Pues alla que vamos!

                                                                  

Y vamos a lo que es un día normal en la vida de la casa grande del Cerro Fraser, donde Marsali ha decidido que una suegra que descuajaringa humanos seguro que guarda otros secretos, y ahí la tenemos, haciendo preguntas incómodas a Claire mientras esta riega con amor sus trocitos de moho con patas.

A ver si me crece pollacina y hago Viagra

Para que no nos den más vueltas los ojos de lo normal, los guionistas nos han evitado la chapa de Claire diciendo que si bla ble bli del moho y es a través de Marsali que conocemos que somos unas esnobs de los colores mohinociles y que solo nos interesan unos en concreto, que son los que estudiaremos con el microscopio. Nos da la impresión de que, tras el momento "juega con el muerto como si fuera un Señor Potato" del otro día, le cuentas a Marsali que su suegra viene del futuro y ni se inmuta. Eso sí, no nos libramos del plano del pan volviéndose roquefort mientras que Claire dice bla ble bli sobre toquetear en el pasado con cosas del futuro.

Lo que seguro no toqueteas son tantos cacharros para limpiarles el polvo

Tras la cabecera, vemos una bella estampa nocturna con silueta de maromo lumínicamente recortada que nos hace aplaudir un poquito, ya que hasta la silueta de Jamie Fraser nos pone tontonas. Nuestro maromo supremo llega sigiloso a su casa, donde se santigua y nos da las gracias por existir y no haber abandonado la serie a pesar de los porros que nos hemos fumado en algunos capítulos.

A mí la mano no me huele a porro, precisamente

Nos vamos a ahorrar el chiste soez sobre a qué nos gustaría que le oliera la mano porque en ese momento se despierta Claire, sin duda notando las ondas fraserianas de la proximidad de su maromo y ansiando que sus olores se mezclen con los de su marido, algo que no va a pasar porque nos hemos inventado todo esto y realmente Jamie le está dando las gracias a Dior por tener a su Sassenach esperándole y Claire está conmovida pero no en plan guarreril.

Pero para el trocotró siempre estoy ready, no lo olvides

Jamie pone al día a Claire de todo lo que pasó en el capítulo anterior y de que los reguladores van camino de ser unos legionarios de la vida (les falta la cabra) que no temen a la muerte, así que debe reunir una milicia rait nau porque la cosa se está poniendo muy malita y Tryon va a mandar más tropas y, tal vez, ¡tal vez!, si Jamie logra juntar un grupo considerable, pueda evitar una guerra asustando a todos con un despliegue de fuerza. Pero viendo las ideas que nublan las reguladoras cabezas tiene bastante claro que no les libra de una guerra ni Penry.

Never forget

Ni me voy a molestar en decirte que no porque vas a venir igual

Efectivamente, para qué gastar saliva en eso cuando puedes usar la lengua en cosas más placenteras, adorado Jamie. Ciertamente, un médico siempre es necesario en una guerra pero es que Claire iría aunque sus conocimientos fueran sobre cómo hacerte un retrato con un seis y un cuatro. 

Un retrato se merece mi cular aparato

Nos gustaría repasártelo un rato

Con esa pornocular imagen nos distrae Jamie mientras Melopollè toma nota del anuncio que deben imprimir y repartir por las colonias de la zona diciendo que el buenorraco Jamie Fraser va a pasar por la zona cual vendedora de Avon para reclutar hombres para su milicia.

Preparádose para recibir a Jamie y su miliciosa cosa

La secuencia sirve también para que sepamos que Melopollè hace un estupendo whisky que llena de orgullo y satisfacción a su pelirrojo padre y para que sepamos que siguen teniendo esa preciosa relación que tanto nos gusta y que jamás vemos. Tras un bucólico interludio lleno de imágenes cotidianas de gente haciendo cosas y de Marsali descuartizando un cochino, estamos ya con los sacos de dormir y el camping gas preparadas para partir hacia donde Jamie nos quiera llevar pero sin que los nervios bajeriles que nos produce la presencia de semejante highlander nos impidan ver la cara preocupada que este pone cuando Fergus le da una carta de remitente desconocido para nosotras (portadora de malas noticias seguro, acuérdate, Mari, que ya te lo estoy diciendo). Y más despedidas y encargos a Marsali de que cosa gorrinillos y de que estudie el moho para convertirse en la clase de mujer que su madre, LaGuarri, odiaría y de la que Claire se sentiría orgullosa.

The Descuartizamiento Team

Para Bree, por supuesto, Claire reserva una despedida especial y destinada a que nos emocione especialmente.

Claire, vete a ejercitar el verbo 💩

Y esto, queridas niñas, es lo que pasa cuando traes a Mñe por estas reviews. Un pelín cabreadas por la *uta mierda de despedida que Brianna le da a su padre y descojonadas de la risa porque la pelirroja se sienta como Escarlata O'Hara al quedarse sin maromos alrededor porque estos se van a la guerra, nos quedamos con Bree mientras da a un jiñadito Roger todo el cariño que no es capaz de dar a su maravilloso padre, ya que su capitán Pescanova también parte a la caza y captura del miliciano.

¿¡¿Pero qué ven mis ojos?!?

Lo que el cerebro de Kim registra

Me sangran los ojos hasta de las fotos

¡¡Pero PERO PEROOOOO!! ¿¡¿Ha tenido Roger siempre esos pelos cejiles?!? ¡¡¡¡Que me muero del susto!!!! Perdonad que no me entere de esta conversación de despedida en la que hablan de que Jamie confía en Bree y de que Roger está tan perdido en ese mundo como un pulpo en un garaje porque no soy capaz de ver más allá de esas cejas que son capaces de darte sombra si te acuestas debajo. Y con ese parapeto cejil parten hacia su destino, pasando por un bosque digno de que te salte por allí Geralt de Rivia (#NuestrasGanasMarranas). 

Sufro de comunismo, un huevo colgando y el otro, lo mismo

Pues no, que lo que quiere es darle las malas nuevas sobre Cabronnet, que lleva la pobre tres episodios siendo la estrella sin conocer el secreto de Puente Viejo. Resulta que la carta de remitente desconocido la había mandado el adorafollable Lord John contando los últimos tejemanejes del malvado oficial de la serie y los Fraser encuentran algo de consuelo en que Bree no lo sepa. Ay, queridos, necesitáis leer el blog de la Gossip Girl del Cerro Fraser, no os digo más. Para que se nos pase el mal rollo, nos reunimos en torno a una fogata para asar chorizos y contar historias.

Con este claymore ganamos cualquier batalla

Vamos, que tenemos una secuencia entera para comentar que hace un frío que se les han puesto las bolas como cabezas de alfileres, que Roger es muy peludo (ya le hemos visto las cejas, ya...) y que Jamie no va a pasar frío porque le van a frotar el palote hasta que eso parezca un ninot valenciano en la Nit del Foc. Pero a la mañana siguiente se nos terminan las gracias cuando atrapan a un ladrón en el campamento.

¡Coño, Sosiah! El cazador cazado y despeluchado

Pero, como esto es Outlander, hay que hacerlo más divertido...

¡Otro Sosiah!

No me entero ni de mi nombre

Pues mira que te cuento, chica. Resulta que el Sosiah (Josiah para la gente normal) peinadito es el que conocemos, ese que lleva la marca del ladrón y al que Lizziepollas miraba con ojos golosones. Y el despeluchado es Kehasiah (Keziah para la gente normal), su sordo hermano gemelo. Porque sí, queridas, cualquier tiempo pasado fue mejor pero únicamente si tienes a Jamie Fraser en tu cama, ya que la realidad de estos chicos es mucho menos idílica y mucho más común. Ambos trabajaban para un tirano-hijoeputa-malparido-gonorrea que los maltrataba, de ahí viene la sordera de Kehasiah (en principio pensábamos que era roña pero no, son tímpanos rotos). Sosiah pudo escapar hace un año y, teniendo ya la protección fraseriana, fue a por su hermano, que estaba que se comía a Cristo por las patas y por eso robó la comida en cuanto la vio. Son dignos de lástima, los pobres, tan blancurrios y solitos en la vida, que su familia murió de los males del mar.

Se pusieron tan verdes como yo pero con funestas consecuencias

Sosiah, ya que se ha puesto a hablar, no para, y les cuenta su historia. Que si fueron vendidos a los Beardsley (que pasaron a ser sus dueños por los siguientes treinta años), que les maltrataban, que Sosiah se escapó, le pillaron robando un queso y le marcaron como ladrón como advertencia (y da gracias, que Jean Valjean fue a la cárcel por robar una hogaza de pan), que por favor, highlander supremo, no nos lleves de vuelta con esa gente... Tranquilo, Sosiah, que Jamie Fraser es un maromo que se viste de la boa a la cabeza y no solo no os va a mandar de vuelta, sino que va a ir a hablar con él para conseguir vuestros contratos y quitaros el temor de volver a sufrir su tiranía.

Le haré una oferta que no podrá rechazar

De tu mano, no rechazamos ni el cianuro

Jamie encarga a Roger que siga con los planes previstos y vaya alistando a todo bicho viviente, mientras él y Claire van a que el señor Beardsley les dé los contratos de los gemelos, hablando por el camino de la necesidad de que Claire le quite a Sosiah la marca de ladrón que lleva en su mano igual que le quitó a él la joputesca marca que llevaba en su bello cuerpo al final de la primera temporada. Ya en la casa (que parece la prima pobre de la de Esta casa es una ruina), mientras que Claire husmea por su cuenta (qué raro, chica...), una huraña señora Beardsley le dice a Jamie que se quede con los gemelos, que nos los necesita y que su marido ha estirado la pata.

Los Fraser han vivido ya mucho como para no darse cuenta de que ahí hay gato encerrado

¡Lo que hay son cabras encerradas!

¡Y bastantes! Normal que la casa huela como el taxi que llevó a Will Smith a la casa de sus tíos en Bel Air y esté tan llena de mierda que el pobre Wally no se escondería allí ni por equivocación. Lo que pasa es que a Jamie y Claire no les queda más remedio que pasar para echar un ojo mientras la señora Beardsley busca los papeles de los muchachos, que no se fían ni un pelo de ella. Y normal que no se fíen, viendo lo que Claire descubre...

¿Están rodando arriba Breaking Bad y no nos hemos enterado?

¡Sube, Claire, que te estamos esperando para hacer el crossover!

Tú y yo sabemos que a esas alturas del capítulo ya estaríamos vereda abajo gritando que esa casa es digna de que Mulder y Scully vayan le echen un ojo, pero antes de terminar de escribir esto, ya está Claire subiendo las escaleras a ver qué es lo que produce ese líquido y tan putrefacto olor.

Los pestosos pies de Bree huelen a rosas comparados con esto

A ver qué maravilla ilumino...

Estoy mojama

¡¡Madre míaaaaaaaa, que está ahí muerto el marido o el brujo Warlock!! De nuevo, tú y yo estaríamos ya haciendo morder el polvo a Forrest Gump en nuestra carrera hacia el mundo de los vivos, pero Claire no puede tener un muerto delante sin ponerle sus zarpas (y que dé gracias el muerto si no le hace la autopsia con una cuchara de madera), así que estira su manita limpia y...

Hola, Claire, ¿me haces unas tortitas?

¡Su fruta madre!

¿¡¿Pero eso es una casa o el Pasaje del Terror?!? ¡¡Que nos han salido hasta canas en el xirri del susto!! Claire, por supuesto, ha sufrido un microinfarto, pero nada que sus poderes doctoriles no sepan manejar. Por lo visto, hace un mes al señor Beardsley le dio un apechusque que casi las rosca (vamos, que le dio una apoplejía) y la señora Beardsley, en lugar de ayudarle, lo dejó ahí para que se hiciera de todo menos gracia encima. Y tú pensarás que por qué no le dio con el cubo de la fregona y lo remató, que así podía ella tener la casa limpita para ver Netflix tan estupendamente. Pues no lo hizo porque el señor Beardsley era un hijeputa-malparido-gonorrea que la maltrataba y la chica quería que recibiera el sufrimiento que le había dado y un poco más, si era posible, por si la justicia divina miraba para otro lado cuando estirara la pata y no recibía su merecido en el otro mundo. Así que le daba de comer y lo mantenía con vida para hacerle todas las perrerías posibles. 

Y me lo he pasado pipa

Yo a esta mujer la tendría antes como amiga que como enemiga, ya te lo digo. Ajeno a toda esta incursión en la novela gótica que están teniendo sus suegros, Roger está reclutando soldados del amor como si fuera Marta Sánchez aunque con menos éxito que la cantante en su momento.

O me ofreces más dinero o me dejas que te toque el pandero

Como Roger aún no tiene perfeccionados los poderes seductivos de su suegro (y su cuerpo no se lo va a ofrecer porque la mirada golosona de la señor nos la hemos inventado), le ofrece más dinero por dejar que sus hijos se unan a la milicia y le da su palabra de que volverán sanos a su casa. 

Otra cosa es que traigáis todo en su sitio, Hugh & Ian Og Findlay

Aquí hay que saber el nombre de todos, que luego tienen importancia y no sabes de dónde salen. Y, tras este inciso, nos vamos con los Fraser al episodio de Halloween de Los Simpson que están viviendo, donde Claire está feliz como una perdiz enseñando los pies churruscados del señor amojamado y quitándole PUTOS GUSANOS del cuerpo.

Estoy que ni en el reciclaje me cogen

¡Rápido! ¡Que alguien nos recuerde por qué vemos la serie!

Yo te doy tres razones, una gorda y dos aproximaciones

Acabamos de perder el hilo de esta review

Para más alegría, el señor amojamado no habla pero sí entiende y se puede comunicar con ellos guiñando los ojos, como si estuviera jugando al mus. Como el juramento hipócrita de Claire le impide irse y dejarlo a su suerte, Jamie le ofrece llevárselo a Hillsborough para que alguien lo cuide, momento conversacional que la esposa del mojamas aprovecha para intentar que deje este mundo y se vaya al *uto infierno, algo que Jaime le impide. Y en el forcejeo que tienen, la mujer se da un golpe y...

El fandom

¡Esta casa tiene más sorpresas que un huevo Kinder! Pues nada, que resulta que la mujer estaba embarazada y, entre el trasiego y la presencia de Jamie Fraser por allí, sus bajos no han sido capaces de quedarse quietos y se ha puesto de parto, que se resuelve rápidamente y con resultado satisfactorio.

Hola, soy guapa y sin genes mojamescos

Mira, chica, yo ya, si aparece por allí Raphael cantando Mi gran noche, me lo creo todo. Pues resulta que la mujer está contentísima porque la niña no es hija de su marido, algo que ella sospechaba tras aquel revolcón en el pajar con Idris Elba.

Vuestras ganas marranas

Pues efectivamente, Idris, vive de ilusiones el tonto de los co**nes. La mujer, que se llama Fanny, le cuenta a Claire que es de Baltimore, que el hijoeputa de su marido mató a sus anteriores cuatro esposas y que tanto a ella como a los gemelos los molía a palos. La pobre no sabe cómo va a mantener a la niña, ya que de amor no se va a alimentar (además de que ni ella misma sabe cómo anda de instinto maternal). Un señor apechuscado, una guerra inminente, una época sin microondas ni iPhones... Menudo panorama para criar a un bebé y formar una familia, ¿verdad?

Y te lo digo con cara de señorita Rottenmeier

Cuando te pones así, te achucharía una cabra loca

Claro, para Jamie no hay más mundo que el suyo, pero Claire sí tiene acceso a otros y sufre por su prole. Y ya sabemos que entre que lo pase su mal su marido y lo pase mal su hija, ahí te pudras, Jamie Fraser. Obviamente, Claire tiene razón cuando dice que en el siglo XX van a estar más protegidos, al menos de las guerras y de las enfermedades, pero también tiene razón Jamie cuando dice que en el futuro van a estar sin su familia (y ya sabemos que nada protege tanto como el cuerpo serrano de un highlander). 

Mis entretelas y yo damos fe

Pues nada, cada mochuelo a su olivo y a dormir a baba suelta mientras una femenina presencia les observa y se va...

Y tanto, como que a la mañana siguiente en esa casa falta gente, y teniendo en cuenta que de los cuatro que quedan, dos no se pueden mover y los otros dos son los protagonistas no son dados a abandonar su propia serie...

Fanny no está, Fanny se fue

Pues Fanny se ha largado y les ha dejado con la bebé, con la escritura de propiedad de la casa, para que la chica tenga posibles en un futuro, y con los contratos de propiedad de Sosiah y Kehasiah.

Planto un circo y me crecen los enanos

No tengas ninguna duda, Jamie, porque ahora te tienes que ir de allí con una recién nacida, una cabra y tu mujer, parecéis carne de chiste. ¿Y con el mojamas qué hacemos? Jamie lo tiene claro...

Lo voy a matar con una sobredosis de mi belleza

Mejor muerte de la que se merece desde luego es. Claire sabe que, en este caso, hace tiempo que se le cortocircuitó el juramento hipócrita, así que, por una vez, calla y deja a Jamie hacer (que menudo placer para él, también te digo). Y, de todos modos, fíjate tú qué majo que le va a dar la oportunidad de elegir a través del guiñesco lenguaje. 

O que las haggards pongan el gif correspondiente porque no encuentran el gif adecuado

¡Allá que vamos!

Primera pregunta. Está usted que si le atropella un tranvía y le remata un autobús estaría mejor que ahora. ¿Quiere que mi mujer le empiece a desmembrar para mantenerle con vida?

Que seguro que me corta la cola primero

Segunda pregunta. ¿Quiere usted que lo mande al otro barrio?

Ya estás tardando

Tercera pregunta, la refinitiva. ¿Le pide usted perdón a Dior por haber sido de la estirpe del Demonio y a la audiencia de esta serie por haberles obligado a ver toda su historia, parando así la nuestra?

¡¿¡Cómo?!?

No te mereces ni que te mate con mi mirada

Tranquilo, que ya lo matamos nosotras como si nada

Vamos, vamos, el mojamas asqueroso, que nos tiene aquí a los Fraser todo el capitulo con un sufrimiento que pa qué para ahora hacernos esto... ¡A tomar por Cullen! ¡Hombre ya! Encima se queda nuestro Jamie con el mal rollo de que, como su padre también tuvo una apoplejía, lo mismo se quedó también boniato y sufriendo y Jenny no se lo quiso decir.

Vamos, lo que me salga del xirri

Sé que me salvarías porque a ver quién te aguanta en esta serie sin mí

Más listo que el hambre es nuestro Jamie. Y con estos alegres pensamientos, despedimos el extraño episodio y esta review. Ya sea que nos den un episodio de esos que nos deja sin aliento o uno en el que nos matan del aburrimiento, ¡la semana que viene nos veremos por aquí para comentarlo en la mesa camilla con el café y el anisete! ¡Os esperamos!

CONCLUSIONES FINALES
- Pues nos hemos quedado que ni que nos hubieran tirado un jarro de agua fría por la espalda con el corte de rollo regulador que nos hemos comido hoy. Pero somos de ver el lado positivo de las cosas y hemos disfrutado mucho de ese minicuento de terror gótico estupendamente bien ambientado.
- Un acierto poner a Marsali como ayudante de Claire en todas sus cosas experimentales, más que nada porque justifica que se tengan que explicar las cosas sin tener que escuchar la voz en off de Claire y, de paso, le das más papel a la señora de Melopollè, un personaje que apenas vemos.
- A pesar de que visualmente los gemelos no nos aportan placer alguno, su historia nos sirve para poner los pies en la realidad de esa época, que básicamente era un cagarro.
- Y, chicas, qué guapo Jamie Fraser. A ver, que sí, que eso siempre, pero es que estos dos últimos capítulos le debe estar acicalando, iluminando y adorando con la cámara un grupo de fanes de aquellos lares, porque estamos al borde del colapso por exceso de excitación xirrinal cada vez que sale. ¡Nuestros dieses para los responsables!
- Y poco más podemos decir, porque donde no hay mata, no hay patata y con capítulos así no podemos ser magas, salvo para quitarnos las bragas 😆.

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