Gallos con espolones: Ulrich Thomsen

Queridas haggards: sé que con esta entrada voy a tener mis más y mis menos con vosotras, pero es lo que hay, mis gustos son a veces de lo más ecléctico y/o raruno. No hago nada más que cumplir con el lema haggardiano no oficial: A una haggard LeCaben todos. Imaginad cómo va ya el tamaño de nuestro bocata maromial.

Y el mío lleva extra de pepino

Y digo esto porque el gallo que traigo hoy aquí no es precisamente un hombre que podamos llamar cachas al uso, ni guapo, ni nada por el estilo... peeeero tiene ese atractivo que le da interpretar magistralmente a un personaje badass, con aires púdicos a la par que cabrones: Ulrich Thomsen aka Kai Proctor en Banshee.

Con barbas y pelos de recién follao todo mejora, ¿eh?

Me veo a todo el fandom de serie (sobre todo a Kim, seguidora de Banshee cuando nadie la veía) echándose las manos a la cabeza y gritando que cómo estando ahí "Ojitos" Hood se me ocurre hacer un post sobre este tío descolorido y con la boca como un tajo en un tomate. Y yo respondo que porque en el mundo de la ficción me van los malos sibilinos y estilosos, y Kai Proctor cumple todos los requisitos, con la excepción de que tiene un único defecto que le extirparía a base de hostias: la Pichote de su sobrina Rebecca. 

Corre, corre, que las haggards vamos detrás con un hacha

Dejemos a esa petarda y centrémonos en Ulrich. Digamos que este actor danés viene a ser una especie de hermano mayor del guapérrimo Nikolaj Coster-Waldau. De hecho, son amigos íntimos y han participado juntos en alguna que otra producción como bien me apuntaba en su día nuestra querida haggard Allison Gioberti Powell, cazadora de gallos y pollos de gran valía dentro de nuestras huestes y a quien dedico, si me lo permitís, este post. 

Allison, sujétate las enaguas que se te van a caer

Ella, que tan sola se sentía mientras veía Banshee porque le hacía tilín Kai Proctor, halló en mí una aliada en sus desvelos cuando yo empecé a ver esta producción. Cómo me conoce la jodía, todo hay que decirlo. ¿Por qué sabía mi estimada Allison que Kai/Ulrich me iba a gustar? Principalmente por el aire sacerdotil que gasta. Sí, queridas haggards. Tengo una extraña filia con ese tipo de personajes que llevan atuendos claramente eclesiásticos (hábitos, sotanas...) o del estilo. Si seguís la serie, sabréis que Proctor fue amish y, aunque abandonó la secta, sigue vistiendo con ese aire sobrio que sé que a todas os puso perracas años ha en Único testigo. 

¡Coño, Cassie, no irás a comparar!

[Tranquilo, Harrison, que tú estás a otro nivel y lo sabes. No te me pongas celosete.]

El caso es que una empieza a ver Banshee y es un despropósito de sexo y violencia en un lugar que, aparentemente, parece un remanso de paz al haber en él una comunidad tan tranquila como la amish. Pero aquello es un putiferio del que no se libran ni los miembros de ese grupo religioso. Kai Proctor abandonó todo harto de sumisión y capulladas, y decidió montárselo por su cuenta, hacerse rico a base de matadero legal y trapicheos ilegales, tirarse a todo lo que pudiera y, entre polvo y paliza, rezar de vez en cuando, que años siendo amish no se olvidan de un plumazo. 

Reparto hostias sin consagrar

Kai Proctor tiene la facultad de hacer que te cagues por la pata abajo sólo con apretar la boca de piñón y mirar de lado mientras le cae el flequillo rubio por la frente. Cuando eso ocurre, ya sabes que al que tiene delante le van a amputar alguna parte del cuerpo. Y todo eso sin inmutarse, con una tranquilidad de espíritu encomiable.

Preparando la picadora de carne en 3, 2, 1...

Pero como te sonría ya te puedes dar por jodido del todo. Porque este señor ríe poco y, cuando lo hace, no es porque le haya hecho gracia el chiste que le has contado.

¿En serio crees que me van los chistes de gangosos?

¿Tiene Kai Proctor algo bueno? Sí, queridas haggards. Estos personajes malotes siempre poseen un rinconcito en su corazón para algo de amol, aunque sea en cantidades microscópicas. Nuestro adorable matón siente un fuerte compromiso con la familia a pesar de que lo repudie como un apestado. Él se lo pasa todo por ahí y si hay que entrar  en su antigua casa y sacar a su madre enferma para que la cuiden los mejores médicos, se entra y a callar tol mundo. Porque él tiene más cojones corazón que nadie, hombre ya.

Explicándoselo a su padre

En fin, que este actor (y el personaje al que encarna magistralmente) es de los que añaden un plus de interés a cualquier serie. Si bien en Banshee todos son más o menos unos villanos, Kai Proctor es el puto amo del cotarro.

Gracias, Cassie. Ahora te doy una ración de carne de primera IYKWIM

¡Acabo con esta costilla y vamos al lío, Kai!